A que jugamos, expresaba mi niño interior,
en esas tardes en que las nubes asomaban.
Sabìa, que las pompas de jabòn,
me trasladaban a un viaje feliz...
como cuando con dos latas conectadas,
por un hilo, dibujaban un sonrisa express.
Conversando, hilvanando encuentros
tal vez allì la corriente humana,
daba paso a la escucha, en donde
llegamos a sentir al otro en una red
de brazos extendidos a favor del bien estar.
La caricia pura del recuerdo alegre,
es una bocanada de aire fresco,
que invade mis pulmones
y deshacen las pompas de jabòn...
corriendo a las nubes...que ya sonrìen para mì.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrega lo que sientes...